Infusiones y estrés: cómo una taza caliente puede mejorar tu bienestar.

Más allá de su sabor y propiedades naturales, las infusiones ofrecen un momento de pausa en medio del caos diario. Diversos estudios han demostrado que tomarse unos minutos para preparar y disfrutar una bebida caliente puede activar una respuesta de relajación en el cuerpo, ayudando a reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.

Según una encuesta realizada por el Tea Council of the USA, el 75% de las personas que toman té regularmente afirman que lo hacen por los beneficios de calma y relajación que les aporta. Este pequeño acto puede convertirse en un ritual de autocuidado, ayudándote a reconectar contigo mismo, incluso en los días más agitados.

Usar aceites infusionados con orégano, ya sea en infusiones calientes o en pequeños rituales de bienestar, potencia ese momento. La combinación de aroma, temperatura, y propiedades naturales de las plantas crea una experiencia multisensorial que beneficia tanto al cuerpo como a la mente.